sábado, 8 de febrero de 2014

Malito

Llevo unos días malito. Ahora me encuentro algo mejor y voy mejorando de forma lenta. ¿Qué he tenido? Bueno, el martes por la tarde me empecé a encontrar mal. En el estómago empezó un concierto de dark metal y me iba encontrando mareado. Llegué a casa como pude e incrustado en la butaca dejé que me invadiera la fiebre y un progresivo ains qué malito que estoy y cuánto me quejo.

El miércoles no fui a trabajar pensando que esto se pasaría, uno de esos virus encabronados de veinticuatro horas que te dejan echo mierda, pero que al momento se larga a joder a otro. Pero no. 

El jueves fue peor. El estómago recordándome cada segundo su existencia, fiebre, malestar en to el body serrano y... bueno... diarrea; una de las muestras más indignas de malestar corporal. Materia fecal que a pesar de todo y de todos quiere ser libre cual caballo en la pradera y no le importa ni el cómo, ni el cuándo, ni la postura para irrumpir y sentir el viento en la cara y dejar su huella infinita en el mundo. Así que para el médico. No me gusta ir al médico. Y no por ninguna superstición de esas de vete a saber qué me encuentra y vas por un resfriado y sales con un riñón menos y un pecho en la espalda, si no porque no me gusta ir a sitios donde me hacen sentir como un mentiroso. Aunque no lo sea. Mientras iba camino al ambulatorio con los cachetes apretados para no tener ninguna sorpresa, recordé la última vez que fui al médico. Había hecho un cambio de ambulatorio y la enfermera insistió en hacerme una pruebas para poner al día mi ficha.
- ¿Nombre?
- Jorge Jiménez del Moral.
- ¿Fecha de nacimiento?
- Eso no se le pregunta a una dama.
- No eres una dama.
- Ya, pero podría serlo y le agradecería que lo tuviera en cuenta. Además, una dama nunca hace esas preguntas.
- No soy una dama.
- No hace falta que lo jure.
- ¿Fecha de nacimiento?
- 16 de noviembre de 19**.
- ¿Podría decirlo sin asteríscos?
- No.
- Vale. ¿Fuma?
- No.
Y esa mirada. 
Esa mirada que lanzan médicos y enfermeras y que desde pequeño he tenido que soportar y aprender a convivir. Esa mirada desde abajo acompañada de una ligera sorna en los labios y que viene a decir algo así como "Sí, ya...". Y sé que si se atreviera la conversación se desarrollaría de otra forma.
- ¿Dices que no fumas?
- No.
- ¿En serio?
- Hace ya más de cuatro años que no fumo.
- ¿Ni un poquito? Venga ya... seguro que en cuanto salgas te metes un pitillo en la boca. No tienes porque mentirme.
- No le estoy mintiendo. No tengo porque hacerlo. Tengo ** años y no tengo que ir mintiendo a mi médico.
- Ya, pero soléis hacerlo. ¿Fumas? No, claro, decís, pero por dentro solo deseas que me calle, me encienda un cigarrillo y tú puedas sorberme la boca con un beso para capturar el humo, ¿verdad?
- No.
- Porque me deseas.
- ¡No!
- Venga, todos tenéis fantasías con enfermeras. No me digas que nunca me has imaginado con el uniforme de gala, guantes y armada para un buen enema soltando palabrotas.
- ¡Qué no!
- Confiesa... confiesa. Me deseas.
- No.
Y así sigue.
Pero, claro, no dice nada y con condescendecia acepta la "mentira".
- ¿Bebes?
- No, no bebo alcohol.
La mirada.
- Apunto que de forma social.
- No, apunte que no bebo alcohol. Cero. Nada. Ni una cerveza. Ni bombones con licor. Ni me mojo los labios como las abuelas en los brindis. Cero. Nada. Ni una gota.
- Ya...
La sonrisita.
- ¿Comes verdura de forma habitual?
- Si.
Sí, ya...
- Y los dulces.
- Me gustan, pero no soy mucho de bollería.
Sí, ya...
Y así ad nauseam.

Así que no iba con muchos ánimos. Por suerte no estaba la enfermera y mi doctor es un señor muy mayor con ganas de jubilarse que va la grano gracias a los años de indolencia. Pim, pam, gastroenteritis de campeonato. A cuidarse, comer suave, no forzar, papel de water y paciencia. Anda, largo que no te quiero volver a ver.

Y en eso estamos. En la paciencia, los rollos de papel y la manzana y la tostada para desayunar. Mejorando, pero todavía con algún sprint al baño. Han sido días de leer poco, escribir menos, ver alguna película con somnolencia y desear que todo pase ya y que mi aparato digestivo y excretor vuelva a la normalidad.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Que te mejores. Te esperamos con cariño.

Cristina dijo...

Espero que te mejores pronto. Se te echa de menos por aquí ;).

Karou! dijo...

Buuuu :/ Qué mal. Espero te mejores. Te esperamos <3