domingo, 19 de julio de 2015

Debe ser el calor...

Ayer entra en la librería un muchacho de perilla bien recortada. Se dirige raudo y en silencio a la sección de guías de viaje y se queda un buen rato observándolas. Tras unos momentos de escrutinio, se acerca donde estaba yo y sin un hola, un buenos días corazón o un disculpa me puedes ayudar, lanza una pregunta al aire.
- ¿Las guías de Corea dónde las tenéis?
- Lo siento, no tenemos ninguna.
- ¿Pero dónde están?
- Ahora no tenemos.
- ¿Me puedes mirar en el ordenador para asegurar que no tienes ninguna?
- Sí, claro, puedo mirar, pero la sección de guías la tengo bastante dominada y no tenemos.
Consulto en el ordenador con mi habitual frescura y buen hacer, con ese teclear que me ha hecho famoso y que hace que los cliente se queden embelesados y piensen lo mucho que en esos momentos me parezco a Robert Mitchum.
- No - confirmo -. No tenemos. Y no hemos tenido ninguna. Algún libro de viajes, sí, pero guía no hemos tenido. Podemos mirarlo, si quiere, en inglés y pedirla.
-Ya sé que está en inglés, pero es que... - y lo que viene ahora merece punto y aparte y doble espaciado.

-... joder, hostias, sois unos desgraciados. Eres un desgraciado. No tener una guía de Corea es de joputas. Joder, hostias, es que... ¿pues sabes qué? Me la voy a bajar en pdf y a la mierda tu negocio. A la mierda. Te voy a joder el negocio. Así queréis trabajar, claro que sí, sin una guía. Pues me bajaré el pdf y te joderé el negocio.

Y entre balbuceos, masculleos y mi estupor sale indignado de la tienda dejando tras nosotros parte de su mal humor convertido en hilaridad de libreros y clientes. Debe ser el calor, pensé. O todas esas ilusiones que uno se hace y que en un momento y ante la impasibilidad del mundo se convierte en humo. Un mal día por una bronca con un jefe, un repartidor de leche o un es que no me dejan mi columpio favorito que se traduce en bronca a un tercero. O gilipollismo, que también puede ser.

Expectativas que no se cumplen.
Como aquel que quería un mapa de todos los caminos de Catalunya desplegable, pero que fuera pequeño para llevar en el bolsillo en una escala grande, pero en mapa pequeño. O aquel de una guía de caminos y senderos del Amazonas para hacer running. A veces nuestros viajes soñados chocan con la realidad editorial. O con la realidad a secas.

Es entretenido y despista del tedio de la campaña de texto con sus cuadernitos, sus libros de ejercicios, sus nuevas ediciones de los mismos libros cambiando un par de ejercicios, los mapas y el orden de los textos y sus quejas de lo carísimos que son los libros. Que lo son.

3 comentarios:

Mara Oliver dijo...

O_o

¡cómo está el patio! XD
besotes!

Cristina dijo...

"La librería que se hundió por no vender guías de Corea" XD.

Anónimo dijo...

que se vaya a Corea y no vuelva. estoy leyendo American Psycho, y he pensado que este está peor que Pat Bateman