domingo, 6 de diciembre de 2009

Lecturas imprudentes - El divino marqués

Con catorce años mis padres me compraron una colección de libros entre los que encontré Justine o los infortunios de la virtud, de El marqués de Sade. Le comenté a un conocido que sentía una enorme curiosidad por leerlo. Su respuesta fue:

- No lo hagas. Con la edad que tienes aún conservas una inocencia respecto al sexo que seguramente el marqués te arrebataría para siempre.

Naturalmente, después de aquellas palabras me abalancé sobre el libro y lo devoré en tres febriles noches. Y entre pulsiones, malas caras, desagrado e incredulidad, me sorprendí a mí mismo lanzando más de una carcajada por las desventuras de esa tontolaba de Justine.

¿Si destruyó algo de mi inocencia respecto al sexo? Bueno, me dio cierta flexibilidad, cierto humor y cierta teoría, pero a la hora de la verdad fui tan inocente y torpe como todos. Quiero decir que con los pantalones bajados por primera vez ante una mujer, a uno se le olvida toda la literatura leída.

4 comentarios:

Casteee dijo...

A la hora de la práctica el manual de la teoría no sirve para nada xDD

Besitos

Enrojecerse dijo...

jaja me he leído esta entrada y la anterior, y me han encantando las dos. hace una semana que estoy con el blog y lo único que quiero es expresar lo que pienso y enseñar lo que tengo por dar, pero me he dado cuenta que hay mucha gente que no lee a gusto, que lo único que intenta conseguir son cuatro: me gusta.
qué pena, la verdad. el arte de escribir es precioso como para no saber valorarlo a fondo y solo querer "ser popular" en un mundo virtual.
unbeso:)

Sebastián Leonangeli dijo...

La primera vez no te acordas ni como te llamas.
Con suerte te acordas alguna escena de alguna película que no deberías haber visto y decís "Ahhhh, esto va acá!"
Sucede en las mejores familias :)

Jorge dijo...

Casteee: pero una base teórica viene bien. Y, despues, conviene seguir leyendo e informándose a nivel teórico.

enrojecerse: bienvenida al mundo blog. Escribir lo que gusta y con ganas de compartirlo. Esto es lo que creo que de verdad hace bueno un blog.

Sebastian: gracias a las películas que no deberíamos haber visto... y a las advertencias de quedarnos ciegos y todo eso... Nos dan esa base que se necesitó.