martes, 3 de marzo de 2009

Martes

El martes es el día que no sé quién inventó para demostrarnos lo larga que puede ser una semana laboral.

Los lunes suelen llevarse toda la mala fama, pero son días casi llevaderos por lo que supone de ruptura con el fin de semana. Aunque todo está sabido, en cierta manera es nuevo. Vuelves a ver los libros, haces ejercicios de memoria para saber cómo estaba todo el sábado, suele entrar gente a comprar, consultar o sencillamente mirar, etc. Los martes, en cambio, no pasa nada. Son días de nada donde el próximo día de descanso aun ni asoma las patitas por el horizonte. Además, los martes suelen ser días inoperantes que me entristecen. ¿Por qué? No lo sé. ¡Cómo conocer todas las maravillas y razones que hay dentro de mi nunca suficientemente bien valorado cerebro!

Es que los martes están siendo muy aburridos... No hay trabajo. Uno de mis compañeros de trabajo se dedica a limpiar los lápices. Uno por uno. Con un trapito. Hoy yo he estado haciendo unas estanterías. Con madera y esas cosas. Y tengo que reconocerlo, me estoy convirtiendo en un manitas. Algo chapuzas, vale, pero en un momento os construyo unas estanterías para libros. Las editoriales siguen invadiendo con novedades, pero los clientes parece que no entran. Largos ratos de la tienda vacía. Solo aparecen los clientes habituales, los que pase lo que pase compran sus libros. Los otros, desaparecidos. Uno no sabe muy bien como llenar las horas de trabajo. Me dedico a escribir mentalmente. Y la sección infantil/juvenil, mi sección, ni se mueve; un páramo desierto donde las novelas de aventuras, las historias de novios y los álbumes ilustrados se mueren de aburrimiento y soledad.

No sé, son tiempos difíciles para todos.

Otra cosa.

Este viernes 6 de marzo de 2009 en L'ou com balla, bar insigne de esta bella ciudad que es Igualada, se celebrará lo que se ha dado en llamar una fiesta U2 aprovechando que hoy salía a la venta el nuevo disco del grupo y que se llama algo así como Ningua línea pa llá l'horizonte. Empezará a partir de las 12 de la noche y se oirá música de los irlandeses, se beberá, se sorteará algo y a lo mejor se pasa Bono a decir buenas noches.

Toda esta publicidad descarada viene motivada por un motivo muy sencillo: soy coorganizador del evento junto con Cesc con el que ayer compartí la primera escucha del disco y que según él fue un momento histórico ante mi ligero escepticismo. La iniciativa de la fiesta fue suya y yo le secundo en la idea de pasar una noche escuchando canciones de U2. Y tiene mérito ya que a mí no me gusta el grupo. Pero cualquier excusa es buena para reunirse en un bar con amigos y conocidos. Así que ya lo sabéis, si este viernes estáis por Igualada pasaos por L'Ou, nos tomaremos unas cervezas y, si insistís, la próxima vez ya invitaré yo.


Y por último, una tira de Calvin y Hobbes. Que siempre viene bien.

Calvin: Dicen que el mundo es un teatro. / Pero, obviamente, la obra se improvisa y todo el mundo se inventa su papel. / Hobbes: Por eso es difícil saber si es una farsa o una tragedia. / Calvin: Necesitamos mas números bailables y mas efectos especiales.

Estoy completamente de acuerdo con la última frase.

4 comentarios:

Girl From Lebanon dijo...

Mis compañeras y yo odiamos los miercoles...no se si ya es sugestión o qué, pero siempre hay algún marrón los miercoles...

Bss!!

Bellota dijo...

Yo nunca lo había pensado de los días. lo pienso de algunos meses, por ejemplo, ¿qué pinta noviembre ahí en medio, sin hacer nada?

Jorge dijo...

Bellota: en noviembre nací yo, ¿te parece poca la importancia?

Labanon: pues que no pase nada este miércoles... Y no se si es predisposición anímica...

Libélula dijo...

Hola Jorge!

Siempre odié los miércoles y soy una ferviente seguidora que ese día no se debería trabajar... un mini recreo de la semana. Supongo que se debe al hecho que todos los martes me junto con mis amigos hasta tarde y llego rota al trabajo.

Adoro a Calvin y Hobbes, son personajes entrañables. Pero confieso que Mafalda es la que se lleva todos los laureles en mi cuore.

Besos y si llego, paso por L'Ou sino empieza y brinda por mí.
Libélula.