sábado, 11 de octubre de 2008

Sobre bebés presentes y futuros

De un tiempo a esta parte parece que mi vida se ha convertido en un continuo estado de "tío adoptivo". Me refiero a que en unos pocos meses la población infantil a mi alrededor se ha multiplicado exponencialmente con nuevos nacimientos o noticias de futuras llegadas. No solo se trata de mi sobrino (que crece y duerme y todo eso que hacen los niños de siete semanas y que por muy guapo que sea es muy aburrido), sino que la misma semana que éste nació, en las dos habitaciones contiguas me encontré con conocidos que tenían en sus manos a su futura prole. El más que conocido, pero menos que amigo Josep y la camarera del bar donde voy a desayunar todas las mañanas (en esa habitación también estaba su preciosa prima, pero ese es otro tema).

Clientas en la librería que un buen día aparecen con un buen bombo y buscando libros sobre cómo ser padre hoy, mañana, pasado y dentro de tres horas.

Paseos por la ciudad con la sensación de que soy el único que no lleva carrito, niño en los hombros, crío montado en cochecito que se mueve, lloros por chuches y mamá esperando el segundo.

Compañeros de colegio que ya van por el tercero.

Llamo a mi amiga Montse para darle las gracias por el álbum ilustrado que me trajo de Venecia y me suelta que voy a ser tío. ¿Qué? Pues eso, que estoy embarazada. La ilusión no es poca, la alegría es inmensa por todo lo que Montse y yo hemos compartido a lo largo de tantos años. Y a los pocos días foto de la primera ecografía. Naturalmente no veo nada. Bueno sí, parece un bosque, o una selva, o un par de pingüinos. Suerte que Montse rodeó de rojo donde aparecía el bicho (tal como lo llama ella, que conste). Y tuvo la decencia de decir que aquello de no ser como las otras madres que se pasan el día enseñando las ecografías y todo eso queda olvidado.

Y mi muy querido Mr. Fritanga, que en poco será padre por segunda vez (¡si es que se puede reproducir cualquiera!). ¡Sí amigo, padre por segunda vez! De camino viene un alien (tal como lo llama él, que conste).

Naturalmente estoy contentísimo. Y aunque ni la hija o hijo de Montse (que todavía no se sabe), ni el futuro muchacho de Fritanga y su adorable Fiona sean familia mía, no evito sentirlos un poquito míos.

Aunque todo esto no deja de ser un poco inquietante. Se habla de un segundo Baby-boom, una explosión demográfica y todo eso. No sé. A mí todo lo que suene a estadística me escama. Y resulta poco creíble. La explicación a todo esto es más sencilla.

Aquí os la dejo.


7 comentarios:

Montse dijo...

Creo que has dado en el clavo, la explicación más razonable es esa... Nuestros hijos son una plaga que se apoderará del mundo y acabará con nosotros, JA JA JA JA JA JA JA (risa de genio del mal). En todo caso, si salen albinos con los ojos raros e instintos asesinos, algo empezará a oler mal por aquí...

Y te prometo que a mí antes de quedarme embarazada me pasaba lo mismo que a ti, que veía bombos y carritos por todas partes (bueno, y ahora los sigo viendo, supongo que con más motivo).

Y, aunque no creo que nuestro hijo/a te vaya a dar más distracciones que el hijo de tu hermana ni vaya a tener más conversación, ya puedes ponerlo en la lista de tus sobrinos, por supuesto. Y espero que su primer libro se lo regales tú!

Un beso (y ya que seguiré bombardeando con ecografías, JA JA JA!! de nuevo risa de genio del mal)

Cesc Sales dijo...

Pero mira que seras basto!!! Con lo monos que estan los niños. Con sus babas, sus cacas, sus meados, sus dolores de estomago... Y eso por no hablar cuando empiezan a ser mayores (menos pequeñoas) y empiezan con el por que, y luego con el NO.... Más tarde con que quieren la play, y luego salir. Te piden el coche y ves a tu niña que sale con el hijo de aquel tio que te caía tan mal del instituto y................

Que bonitos son!!!!!!

-Anna- dijo...

Jajajjaaja me causó mucha gracia lo de la ecografía, pinguinos y bosques jajajajaja

Pues yo no sé, mi mamá cada vez que se pasea por un shopping y ve una tienda de ropa de bebés me larga esa mirada de perro triste, como queriendo que le fabrique un bebé al instante y yo pienso: No mamá, los bebés no vienen para el microondas como la comida. Ya hasta me da miedo...yo por las dudas sigo caminando. Y eso que soy la más chica, mi hermana y mi hermano están más cercanos a hacerla abuela, pero creo que ella tiene una fijación con que quiere un nieto de mi parte.

Muy buen post, no pude ver la explicación porque mi compu no está funcionando muy bien, pero volveré para verla.

Un abrazo Jorge!

Cloe dijo...

Jajaja, me encantaba esa peli cuando era pequeña. Yo la verdad esque mucho no puedo hablar porque también tengo un enano de 2 años. Pero creo que, si es verdad que hay un baby boom en España vendrá bien porque la natalidad está por el subsuelo y haber quién cojones me va a pagar la jubilación cuando sea vieja jajaja.

Besos!

Amanda dijo...

Bueno, pues que otra casualidad. Hoy me la pasé la mitad de la tarde hablando sobre niños, sobre si algún día me gustaría ser madre. Un amigo y yo divagamos sobre nuestro futuro (bueno, siempre algo fatalistas y tristes), y pues en realidad no se a qué conclusión llegué conmigo misma. No sé si pueda ser madre algún día, más bien, no sé si quiera o si sea capaz... o si al tercer día que pa´se sin dormir querré matarlo.. jajaja

En fin, los gitanos, las cartas, los adivinos y demás me dicen que tendré o tres o cuatro, como toda buena judía jajaja... no todos biológicos, que adoptaré algunos, o que serán de un matrimonio anterior...

Hablamos sobre si me dará la depresión posparto, o que si me dará la crisis, etc. Eso sí, seré buena tía, seré una abuela genial, pero madre... eso es otra cosa.

La conversación terminó por deprimirme, así que mejor nos fuimos al bar; a brindar porque el futuro es mucho mejor incierto.


Un beso!!!!!

Jorge dijo...

No se... de un tiempo a esta parte todo son críos nuevos por el mundo. Que está bien, como dice Cloe alguien tendrá que pagar nuestras jubilaciones.

Las presiones para ser padre han desaparecido. Desde que mi madre tiene a su nieto que ya tiene juguete nuevo y deja de lanzar las miradas de "nunca me harás abuela, hijo desnaturalizado". Eso sí, las cartas o lecturas de manos siempre me dicen que seré padre de mínimo tres criaturas. No se, no se.

Jordi Vivancos dijo...

¡Pues qué bien! Estarás contento, ¿no? ¡Me has metido el miedo en el cuerpo pero bien! Hecho cuentas de los bebés que están por venir a mi alrededor: Montse, mi prima Susanna, la hermana de Ferran, una vecina de mi misma quinta con la que crecí, una clienta a la que tengo mucho apego... ¡Buf! ¿Será verdad que hay una invasión alienígena? ¿Alguien recuerda alguna niebla espesa, una lluvia de berberechos o algún otro tipo de señal? ¡Y con el miedo que a mí me dan las invasiones extraterrestres!

Por otro lado, cuántos recuerdos me trae la película de John Carpenter... ¡Qué tiempos! Christopher Reeve estaba vivo, Kirstie Alley aún no había ingresado en la Cienciología y tenía cintura...