martes, 28 de septiembre de 2010

Entre otras cosas...

Hoy, entre otras cosas, he retirado de la venta todos los ejemplares que tenía en la tienda del último best-seller de Ken Follet en su edición en catalán. ¿Motivo? Alguien la ha cagado. Resulta que en esa edición faltan los dos capítulos finales. En toda la edición que son de... 30.000 ejemplares. Y hay que retirarlos y eso vale dinero y volver a editar el libro y eso vale dinero y la imagen de la editorial queda dañada y eso vale dinero. Alguien la ha cagado. Y de qué manera. La gente se pregunta cómo es posible que una multinacional, un monstruo editorial de siete cabezas como Random House Mondadori ha podido cagarla de esta manera cuando se supone que tiene el mejor equipo, el mejor control de calidad y el mejor de todo los mundos posibles. No es tan extraño. Y pasa más de lo que pensamos. A estos monstruos editoriales (llámales Random, llámales Planeta, llámales Columna, llámales Ed. 62) ha llegado un punto que lo que menos les importa es el libro. Así que las librerías y las casas se han llenado de malas traducciones, malas correcciones, libros con hojas que se desenganchan, faltas de ortografía, duplicación de pliegos, eliminación de pliegos, publicación de mierda sólo porque se debe llegar a unos números a final de mes, etc. ¿Cómo es posible? La pregunta es cómo no pasa más.

Altos jefes de gran editorial pensando en los beneficios de las ventas en catalán tres segundos antes de que el típico pringado que cobra una mierda comunique que falta dos capitulitos de nada y que hay que retirar lso 30.000 ejemplares.

También he tenido una maravillosa pesadilla con zombis. ¡Hacía tanto que no soñaba con el apocalípsis zombi que hasta los echaba de menos! Ha sido tan sangriento todo... Lo único que recuerdo es estar disparando contra esas añoradas hordas de caníbales con una precisión imposible en mí, que me había dejado el pelo largo y me lo había teñido de rubio. Y no me quedaba bien. Que era lo único que me recordaban mis compañeros de matanza.

- Es que ese rubio te queda fatal.
- Ya lo sé.
- ¿Pero cómo se te ocurrió?
- Mira, me dio el punto.
- Es que estás horrible...
- Ya lo sé... dispara a ése...
- Ya está... a la mierda la cabeza del muerto... es que estás feo de cojones...
- ¿Y A. qué opina?
- No le gusta... vigila... ya me encargo yo... joder qué asco, ¿pero cuántos hay?
- Muchos. Es que estás horrible.

Algo así, pero sin los tatuajes, el bikini, las pestañas y los...
-  En serio, ¿podría alguien evitar que pusiera fotos así?
-No.

También una encantadora señora de edad avanzada (también conocida con el sobrenombre de puta vieja de mierda) me ha llamado gordo en el trabajo mientras pedía si había llegado un libro que tenía encargado. No he llegado a pillar el contexto de que me llamara así, pero los gestos de papada y barriga son universales. Y también por segunda vez me han pedido si tenemos la misma novela, pero más larga porque le gusta mucho y esa es muy corta, pero que sea la misma novela, la misma, eh. Y me he enfrentado a la horrible panda de los adolescentes que hablan para adentro y no he conseguido entender nada.

Y me he encontrado esta foto colgada por estos mundo de internes y ha pensado, pero qué coño...


Es que hay gente que está muy para allá. Pero, bueno, como decía mi abuela, "mejor esto que no que se endroguen vete a saber dónde".

3 comentarios:

Diego dijo...

me parto XD

-Anna- dijo...

Respecto a los libros: Te cuento lo que me pasó a mí...voy y me compro el libro de Margaret Mazzantini, La palabra más hermosa. Llego yo a mi casa muy contenta con mi libro, pasa un día y llego a la página 190 o por ahí, y no va que de la página 190 se salta a la 215 o por ahí, y luego pasan algunas páginas y se salta a la, no sé -ya no recuerdo exactamente- 140. Y así...un desastre!!!!
Así que me voy con mi paciencia a la librería a cambiarlo, y me dan otro libro. Pero ya de obsesiva le digo al librero "Esperá que reviso todas las páginas, para ver si este sí viene seguido y no mezclado como puré" -yo sé que vos no me querrías como clienta, soy insoportable jajaja-
Y me pongo a ver, estaba igual que el que me había llevado :S. Me sacó un par de libros más y recién al cuarto encontré uno que estaba "decente", y digo decente porque en realidad tenía las esquinas algo golpeadas, pero bueno, ya lo dejé por la paz, y porque el librero no tenía cara de quererme mucho. El punto es que ese libro es de la editorial Lumen, que es bastante poderosa y que supuestamente tiene buenas recaudaciones y bla bla bla. Así que también ha de ser algo universal de las editoriales.
El día que me editen mi libro -o sea, dentro de muchos años luz- quiero estar junto a la imprenta revisando todas las paginitas...porque si yo fuese la autora como en este caso, puedo llegar a matar a alguien.

Que manera de hablar la mía, todo para contar una tontera.

Respecto al resto: Opino igual que Diego jajajaja.

Abrazo Jorge!

Jorge dijo...

Anna, si el libro está mal, pues está mal y que te lo cambien y punto. Y lo de estar en la imprenta... pero si ahora todo se imprime en China... anda que no te gastarás dinero en viajes, mujer.

A los dos, no os partáis que os podéis hacer daño.